Vivimos en un mundo que todo va a una velocidad de vértigo, dedicamos poco tiempo a casi todo lo que hacemos, y la tendencia es dedicarle aún menos. Por eso muchas veces no obtenemos los resultados que buscamos. Ya me lo decían mis padres: “despacito y buena letra”. Y es que si quiero un resultado de alta calidad necesito dedicarle el tiempo que merece.
Las artes gráficas son un sector donde los clientes suelen cuestionarse y menospreciar el precio de los servicios, pero, ¿se han parado a pensar en cuál es el proceso que hay detrás de una creación grafica?
Muchas personas al ver un logotipo, una tarjeta de visita, un cartel o una ilustración pensarán que el autor simplemente se ha sentado frente al ordenador, ha hecho el primer dibujo que se le ha ocurrido y listo. Pero lo que no sabe la mayoría de gente es que, con toda probabilidad, lo que ellos ven es el resultado de horas, días e incluso semanas de mucho trabajo, trabajo creativo y trabajo de investigación y análisis.
El proceso de una creación gráfica en 8 pasos
Os explicamos brevemente los pasos que seguimos para cualquier creación gráfica que nos proponen.
1. Briefing
El briefing es un documento que entregamos a todos nuestros clientes en el que le hacemos diversas preguntas acerca de su empresa y el producto que nos han pedido que diseñe. Nos sirve para conocer y profundizar lo máximo posible en la empresa: cuál es su valor diferenciador, qué servicios ofrece, la historia de la empresa, etc.
2. Análisis
Una vez que el cliente ha completado el briefing pasamos a estudiarlo y analizarlo minuciosamente para, de toda la información que nos ha dado, hacernos una idea de cómo es la empresa, qué es lo que quiere transmitir al cliente y qué es lo que verdaderamente transmite. Con todo ello desciframos cuales son los valores clave que deben representarse en el producto.
3. Aterrizaje de conceptos abstractos
Con esa lista de valores que hemos obtenido del briefing, comenzamos diversos procesos creativos que nos ayudan a plasmar esos conceptos abstractos en dibujos o palabras concretas.
4. Bocetar
Una vez se han aterrizados esos conceptos abstractos y he obtenido una serie de conceptos concretos que definen a la empresa procedemos a diseñar diversos bocetos de lo que el cliente nos ha pedido. Lo hacemos sin filtro, sin juzgarlos.
5. Diseño
Cuando tenemos un numero de bocetos considerable procedemos a quedarnos con dos o tres para diseñarlos vectorialmente y terminar de pulirlos de manera digital.
6. Primera muestra
Cuando esos dos o tres diseños consideramos que pueden ser definitivos procedemos a mostrárselos al cliente para ver si encajan con lo que tenían en mente y lo que es su empresa.
7. Correcciones
Una vez que el cliente se ha decantado por uno de los diseños nos indica, si así fuera necesario, alguna pequeña corrección que le gustaría hacer al diseño y tomamos su propuesta y, aunque no siempre la plasmamos tal cual nos pide el cliente, la transformamos en lo que mejor encaja con el diseño y la empresa.
8. Entrega final
En el momento en el que tanto el cliente como nosotros damos por definitivo uno de los diseños procedemos a enviárselo en todos los formatos pertinentes.
Como veis, aunque lo hayamos resumido en, —aparentemente—, ocho sencillos pasos, no es un proceso que se lleve a cabo en 10 minutos o media hora. Por ello consideramos que es necesario conocer los procesos gráficos de una creación y tenerlos en cuenta a la hora de valorar el trabajo. Cuando se de la importancia real que tiene el proceso gráfico en una creación se estará dando el valor real de la obra final.
Fuente: La Prestampa